Los escudos fiscales de intereses se refieren a la reducción de la obligación fiscal debido a los gastos de intereses. Las empresas pagan impuestos sobre los ingresos que generan. Los gastos de intereses (a través de préstamos e hipotecas) son deducibles de impuestos, lo que significa que reducen la renta imponible. Así, los gastos por intereses actúan como un ‘escudo’ frente a las obligaciones fiscales.
Por ejemplo, supongamos que la empresa A obtuvo una ganancia antes de intereses e impuestos de $40 000 durante un año. Si la tasa impositiva es del 10%, entonces la obligación tributaria será de $4000. Suponiendo que la Compañía A también tiene una obligación de interés de $5000, el ingreso imponible total será de $35000 ($40000 – $5000). Ahora, la obligación tributaria será de $3500. Esto significa que la obligación de la deuda ayudó a la Compañía A a ahorrar $500 en obligaciones tributarias.
Motivación para endeudarse más
Podemos decir que los escudos fiscales de intereses son los beneficios fiscales de la estructura financiera de una empresa. Por ejemplo, tomar un préstamo en lugar de emitir acciones aumenta el escudo fiscal, ya que los intereses de un préstamo son deducibles de impuestos, mientras que los dividendos pagados sobre las acciones no lo son. Entonces, en cierto modo, los escudos fiscales de intereses motivan a las empresas a endeudarse para financiar proyectos en lugar de utilizar capital.
Tenga en cuenta que el escudo fiscal de intereses es positivo cuando el EBIT (ganancias antes de intereses e impuestos) es mayor que los gastos por intereses.
Escudos fiscales para individuos
Los escudos fiscales de intereses no solo están disponibles para las empresas. Las personas también pueden beneficiarse de esto. Por ejemplo, si tienen una hipoteca de vivienda, pueden usar el pago de intereses para crear un escudo fiscal. Del mismo modo, los intereses de los préstamos para estudiantes también actúan como un escudo fiscal.
Se puede decir que asumir más deudas lo hace responsable de pagar gastos de intereses regulares, pero al mismo tiempo, el mismo interés lo ayuda a reducir su obligación tributaria.
Escudos fiscales de intereses: puede ser riesgoso
A pesar del evidente beneficio de la deuda, no muchas empresas prefieren esta vía. Una gran razón de esto es el temor de no poder cumplir con los pagos de intereses. Otra razón son los “pactos” que vienen junto con la deuda.
Los convenios son básicamente las restricciones o los puntos que una empresa debe aceptar para obtener la deuda. Por ejemplo, una empresa puede tener que aceptar abstenerse de una acción específica, como no vender activos. Además, ciertos convenios requieren que la empresa mantenga ciertos niveles de índice, como el índice de capital de deuda o el índice de cobertura de deuda.
Básicamente, estos convenios están destinados a garantizar que una empresa pueda cumplir con sus obligaciones financieras. En caso de que una empresa no pueda cumplir con estos convenios, puede encarecer aún más la deuda, lo que genera una presión financiera severa sobre la empresa.
Para recuperarse de tal situación, la gerencia puede abstenerse de realizar inversiones productivas o incluso retirar dinero de las operaciones actuales para pagar la deuda. Esto podría reducir el valor de la empresa sobre la base de la futura generación de efectivo.
Conclusión
Por lo tanto, antes de decidir endeudarse con el fin de beneficiarse del escudo fiscal de intereses, es esencial que comprenda cómo funciona. La deuda es una parte importante de la valoración del negocio, pero demasiada deuda también puede afectar los flujos de efectivo futuros. Debe decidir optar por los escudos fiscales de intereses si confía en los flujos de efectivo futuros.
Además, los beneficios del escudo fiscal de intereses dependen de la tasa impositiva del contribuyente. Por lo tanto, comprender las políticas macro actuales y futuras también lo ayudará a decidir sobre los niveles de deuda.
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